"La familia: Un refugio para el corazón herido". Este es el título de la sesión celebrada en la tarde del jueves24 de septiembre, tercera jornada del Congreso del Encuentro Mundial de las Familias, que corrió a cargo del cardenal Luis Antonio Tagle - Arzobispo de Manila y Presidente de Caritas Internacional.
Ante más de ocho mil personas, el Cardenal filipino habló de las heridas y de las situaciones difíciles que viven hoy en día las familias, como por ejemplo la soledad, la pobreza, la enfermedad; sin embargo – afirmó el Cardenal - "los corazones heridos pueden ser sanados" porque "incluso Cristo resucitado tiene heridas".
La familia juega un papel importante en el cuidado de las heridas; en realidad es el "don de una presencia de amor", al igual que la Iglesia es familia de fe y "hospital de campaña para la curación, en la que debemos estar siempre preparados para responder a las situaciones de emergencia". Se camina junto a ellas con el apoyo de unos y otros, y así se les ayuda a crecer en el amor y en el servicio a través de actos de caridad, a través de la oración, sin olvidar la importancia del aspecto litúrgico y sacramental de la fe, que sana estas heridas.
La tercera jornada del Encuentro Mundial de las Familias también contó con la participación de Gianna Emanuela Molla, hija de Santa Gianna Beretta Molla – patrona, junto a Juan Pablo II, del Encuentro - quién explicó que el sufrimiento de las personas estériles es a veces una cruz muy pesada, pero que encuentra un gran apoyo en el amor conyugal y en la cercanía de la comunidad.
En el transcurso de la mañana, entre otros, también habló Monseñor Livio Melina, presidente del Pontificio Instituto Juan Pablo II para Estudios sobre el matrimonio y la familia de Roma, quién en una sesión titulada "Padre, perdóname... Familia perdóname: la familia y el Sacramento de la Reconciliación", subrayó la importancia del perdón en las relaciones familiares. De hecho, es a través de la reconciliación que las relaciones se renuevan y llegan a ser una fuente de vida nueva, además, gracias a ella, las familias se convierten en lugares de misericordia. La presencia de la figura de los abuelos en las familias favorece la construcción de estas casas de misericordia y ha sido un tema que ha sido abordado durante el encuentro: "Amor intergeneracional: abuelos y bisabuelos" en el que Catherine Wiley, fundadora de las Asociaciones de Abuelos Católicos, Philip Butcher, director del Centro Internacional de la Asociación de Abuelos Católicos y Michael La Corte, director de la Asociación de Abuelos Católicos de Estados Unidos, analizaron el tema de la transmisión de la fe a través de las generaciones, enseñando a compartir el amor y a cuidar de la familia.