Hace unos días, el Pontificio Consejo para la Familia ha recibido la visita de Catherine Wiley, la fundadora de la Catholic Grandparents Association (Asociación Católica de Abuelos), una de las realidades eclesiales más florecientes en el mundo anglosajón.
La primera de las abuelas de la asociación irlandesa en el sostenimiento de la transmisión de la fe en el ámbito familiar, de las generaciones más ancianas a aquellas más jóvenes, ha ofrecido su disponibilidad a tomar parte en las próximias iniciativas promovidas por el dicasterio, ante todo la que se desarrollará en octubre de 2013 en Roma: la Peregrinación Mundial de las Familias para el Año de la Fe.
La Catholic Grandparents Association, de hecho, además de estar comprometida en numerosos frentes que conciernen a la vida espiritual de los abuelos, cada año organiza para ellos peregrinaciones a santuarios de todo el mundo: una ocasión para compartir profundamente, en la que todos celebran la memoria de San Joaquín y Santa Ana, que según la tradición son los abuelos de Jesús.
