El Foro de Asociaciones familiares en una carta pública a los parlamentarios y senadores hace el balance de la familia
"Libertad de las personas. Identidad de la familia" es el tema de la carta pública que el Foro de Asociaciones Familiares, integrado por 48 entidades nacionales y cuatrocientas locales, presentó a la Cámara y al Palacio Madama. "Después de años de discusiones parece que ahora el debate sobre la regulación de las uniones civiles, o más precisamente, de las relaciones afectivas entre personas del mismo sexo, ha llegado a un punto crucial en el Parlamento – se lee al comienzo en la carta -. El Comité Judicial del Senado tiene que discutir sobre lo que se llama incorrectamente un ‘texto unificado‘, cuyo planteamiento teórico y normativo plantea riesgos considerables a la identidad de la familia" y da "una interpretación de la Constitución completamente diferente a la que fue reiterada hace apenas unos meses por la Corte constitucional".
El objetivo de la carta, declaran los miembros del Foro, dirigiéndose a los parlamentarios, es "llamarles la atención sobre su principal responsabilidad de salvaguardar el bien común y el todavía muy actual sistema constitucional, que considera a la familia como a una sociedad natural, bloque central e indispensable de nuestro tejido social, sujeto activo de solidaridad y de cohesión social, de la promoción y protección de la libertad y de la igualdad de la dignidad de cada persona, así como escuela de la ciudadanía activa y de los valores sociales de las nuevas generaciones, en los que se reconoce nuestra comunidad nacional ". Según el Foro "los derechos subjetivos de cada individuo, independientemente de su status familiar, deben tener un reconocimiento pacífico. La libertad de la vida afectiva es para todos y la protección de cada persona en estas relaciones es una necesidad, pero esto no significa atribuir o ampliar un presunto ‘derecho’ del matrimonio para todos ". Así, además de la "regulación de los derechos de las personas que viven en uniones de hecho, también han de ser respetadas y preservadas las prerrogativas, la calidad y los derechos de la "familia fundada sobre el matrimonio entre un hombre y una mujer ", institución de relevancia pública". "Para ello - se precisa - se garantizan ciertos principios básicos: la distinción efectiva y diversidad de disciplina entre la familia fundada sobre el matrimonio y las uniones de hecho, como por ejemplo el derecho a la pensión de viudedad, el acceso a la sucesión legitima, la pensión de mantenimiento al ex cónyuge. Para estos derechos se encontrará una solución adecuada para las uniones civiles, distinta de aquella que se prevé para los cónyuges". La carta expresa su "muy negativa" opinión sobre el proyecto de ley Cirinnà, que equipara las uniones entre personas del mismo sexo a la familia fundada sobre el matrimonio y contiene una clara referencia a la llamada "stepchild adoption", que abre el camino a procedimientos, inevitables en el caso de parejas de personas del mismo sexo, como por ejemplo la donación de gametos masculinos o la maternidad subrogada. Seguidamente la carta trata los divorcios rápidos: "Aquel que ha votado a favor del divorcio breve - escriben los miembros del Foro – ha de preguntarse: ’qué medidas he aprobado, votando por el divorcio rápido, para ayudar a la familia, en lugar de fomentar su implosión? Y cuando llegue el momento de discutir el texto Cirinnà que se pregunte: ’cuántas medidas votamos para apoyar a la familia, antes de conceder este falso derecho al "matrimonio para todos"? ’Cuándo será capaz la política de restituir a la familia lo que la familia a diario da a la sociedad' Se trata del futuro del país, se trata de la cohesión social de nuestro pueblo ".