S. E. Mons. Kevin Farrell visitó el Pontificio Consejo para la Familia en la víspera de la beatificación de Santa Teresa de Calcuta. Saludó al personal y les dio cita para su regreso, a principios de octubre. Estas fueron sus primeras palabras.
"Como ya sabéis tengo raíces irlandesas, fui ordenado sacerdote estadounidense y hasta ahora he sido Obispo de Dallas. En estos días estoy acompañando a un grupo muy numeroso de mi propia diócesis para la canonización de la Madre Teresa. Ya me perdonaréis si no hablo bien italiano, pero llevaba 40 años sin practicarlo, desde que estudiaba en Roma.
Desearía deciros que este nuevo Dicasterio es un trabajo que tenemos que hacer juntos; no soy yo el que va a llegar con todo un programa ya preparado; yo mismo tengo que aprender de vosotros, pues sois vosotros los que habéis llevado adelante esta gran tarea durante muchos años. Esto también me lo dijo el Santo Padre cuando me pidió que viniera a Roma para asumir esta labor. A menudo pensamos en la Iglesia como en una institución de Obispos y sacerdotes, olvidando que la gran mayoría - más del 99% - está formada por laicos, son también los laicos los que van a Misa los domingos. Normalmente, la vocación a la que están llamados los laicos es el matrimonio y la familia: todos venimos de una familia y estamos destinados a vivir en una familia. La otra sección que constituye el nuevo Dicasterio – la vida - también está relacionada con la familia porque la vida viene de la familia. La familia es el corazón de este nuevo Dicasterio. Así mismo, mi experiencia como Obispo, en un primer momento como auxiliar en Washington y más tarde en Dallas, confirma la importancia de la labor de la Iglesia en favor de la familia, porque de la familia depende la fe y la evangelización misma. Por lo tanto también me gustaría continuar con este trabajo, con este compromiso, en el nuevo Dicasterio. Deseo que en las próximas semanas el trabajo continúe como antes; también Mons. Simón Vázquez sigue siendo el subsecretario. El nuevo Dicasterio que ahora comienza se definirá mejor a medida que avanza. Sin preocupaciones, con serenidad, continuamos llevando adelante el trabajo realizado hasta el momento". El personal y los presentes saludaron a su vez al nuevo Presidente, dándole una cálida bienvenida y ofreciéndole su disponibilidad para colaborar de lleno con él.