Desde Westminster un primer resultado del cuestionario sobre la familia en preparación al Sínodo
A conclusión de la reciente consultación en las diócesis para el sínodo extraordinario, el cardenal Vincent Gerard Nichols, arzobispo de Westminister, exprimió preocupación y, en el mismo momento, esperanza porque las cuestiones que emergieron presentan “una agenda importante”. La misma introducción del cuestionario dice que: nunca como en este momento anunciar el Evangelio fue más necesario y urgente”. A establecer la crisis de la familia es el aumento de las convivencias y de los divorcios, la maternidad por los “vientres en alquiler” y la regularización de las uniones homosexuales. La necesidad, al fin, es de enfrentar los problemas con estrategias pastorales de larga durada que sepan enfrentar la creciente complexidad de la familia contemporánea. A pesar de la difícil materia del cuestionario, fueron 16.500 los resultados a nivel nacional y de estos más de 1600 fueron gestionados por la oficina para el matrimonio y la vida familiar de Westminister. De las respuestas es posible extrapolar casi un barómetro sobre los desafíos que hay que enfrentar, sintetizándolos en estas categorías: conciencia, preparación al matrimonio, transmisión de fe, cultura de la vida. Sobre la conciencia hay mucha confusión, es necesario empezar de nuevo un catequismo para formar una conciencia moral sobre las cuestiones de responsabilidad de padres y reproductiva. Universalmente aceptado y considerado insustituible, el matrimonio cual institución social y sacramento de la iglesia es apreciado, aunque si hay muchas lagunas variedades de experiencias. Hay que insistir con la formación, desde la parroquia hasta la escuela, para que los jóvenes ,ya el tierna edad, aspiren a una unión estable abierta a la vida. Cuanto a la trasmisión de la fe, es un enorme desafío en un momento de secularismo agresivo y de revolución informática: es necesario estudiar colaboraciones entre casa, escuela y parroquia. La dignidad autentica de cada persona desde momento del concebimiento hasta la muerte natural queda una enseñanza radical en la moderna “cultura desechable”. Sin embargo las respuestas muestran un grande desequilibrio de opiniones: de aquí, el deber a una sensibilización de la opinión publica.