"En Benín el sacramento del matrimonio es una realidad pastoral bien acogida; sin embargo, hay obstáculos del punto de visto cultural para la familia y esto impide que algunos matrimonios puedan satisfacer sus deseos, como por ejemplo el fundar su vida de pareja en la fe en Cristo”. Monseñor Eugene Houndekon, Obispo de Abomey y Vicepresidente de la Conferencia Episcopal, pronunció estas palabras durante la visita ad limina de los obispos de este país de África al Pontificio Consejo para la Familia, el pasado 21 de abril.
La delegación, integrada por 11 miembros, fue recibida por el presidente del dicasterio, Monseñor Vincenzo Paglia, y por el Secretario, Monseñor Jean Laffitte. Durante el encuentro, cada obispo destacó la importancia de la familia como base de la sociedad, una columna, pero, que por desgracia, sobre todo en África, se encuentra bajo una fuerte presión por parte de los organismos internacionales. El principal reto que debe abordarse es la poligamia. Después de un intercambio fructífero con el Presidente y el Secretario del PCF, los obispos de Benín decidieron trabajar juntos para producir nuevas propuestas que se presentarán en el próximo Sínodo, con el objetivo de dar una respuesta más precisa a las familias polígamas que quieren abrazar la fe cristiana. Para ello se ha sentido una gran voluntad para discernir mejor en qué medida estas familias pueden ser bautizadas y recibir más tarde la comunión, un problema complejo, muy similar al de, en los países occidentales, los divorciados casados de nuevo.