La que se cierra hoy en Roma ha sido una semana decisiva para el próximo Encuentro Mundial de las Familias.
Una considerable delegación oficial de Filadelfia cruzó el océano para una serie de reuniones oficiales y de trabajo para definir los últimos detalles de las jornadas de septiembre.
La delegación encabezada por el Arzobispo Charles Chaput y por el alcalde de la ciudad Michael Nutter fue recibida por el Papa Francisco al final de la audiencia del miércoles, y por el alcalde de Roma, Ignazio Marino.
Durante una sesión de trabajo en el Pontificio Consejo los responsables del dicasterio y la delegación de la Comisión organizadora del encuentro (con la presencia del obispo Auxiliar McIntyre) hicieron el balance de la situación cuando sólo quedan tres meses para el evento. En dicha reunión Monseñor Paglia insistió en la necesidad de una estrecha cooperación entre todas las entidades involucradas a fin de poder organizar la semana de los encuentros que será muy compleja debido al gran número de participantes que se esperan.
El jueves, durante la conferencia de prensa, Monseñor Paglia subrayó el carácter mundial del evento que tendrá como protagonista a la familia, con sus historias, alegrías y penurias. También anunció que el Papa, al final de la Santa Misa, entregará el Evangelio de Lucas a las familias de cinco grandes ciudades del mundo (Hanói, Kinshasa, La Habana, Marsella, Sídney); "Queremos - dijo Mons. Paglia - que el Evangelio de la Misericordia sea anunciado en las grandes ciudades del mundo, especialmente en los barrios más pobres y periféricos. Queremos proporcionar el alimento del Evangelio a las familias del mundo para que construyan lazos de amor entre ellas, en la Iglesia y en la sociedad".
El Arzobispo Chaput y el Obispo McIntyre se detuvieron en la descripción del evento, el número de participantes esperados y los recursos utilizados. Mons. McIntyre anunció también los nombres de los conferenciantes de las seis principales intervenciones que articularán el congreso teológico-pastoral de los primeros días del encuentro: fr. Barron, los Cardenales Sarah y Tagle, la profesora Alvarè y el matrimonio De La Guardia.
Una cena en el hermoso escenario de la Casina Pío IV, en el Vaticano, selló la amistad y dio las gracias a toda la delegación estadounidense presente en Roma: "See you soon in Philly!"