La complejidad se manifiesta en cada ocasión y situación, tanto en el urbanismo como en los eventos públicos. Por eso es importante una reflexión que asuma la complejidad sin simplificación ideológica alguna. Será por esto que en Santiago hay más de cincuenta Universidades. Y al mundo académico se han dedicado las dos primeras jornadas de la visita de la Delegación del Pontificio Consejo para la Familia.

 

Mons. Paglia, acompañado por el Nuncio Apostólico Mons. Ivo Scapolo, se ha reunido ante todo con los responsables y, a continuación, con los representantes de muchos Centros de estudio sobre la familia en América Latina, llegados a Chile para el tercer encuentro de RedIfam, la asociación que les reúne y coordina. A estas organizaciones, el Presidente del Dicasterio les ha pedido una doble acción, pastoral y cultural, para que la familia vuelva a ser la meta de las jóvenes generaciones. Mons. Paglia ha afirmado que «es urgente que las instituciones universitarias muestren cada vez más que sólo la familia fundada en el matrimonio de un hombre y de una mujer, basada en la reciprocidad y complementariedad de ambos sexos, en orden a la procreación y educación de los hijos, es un verdadero recurso social».

 

En estos dos días de inmersión en el mundo universitario chileno, mons. Paglia ha dictado una conferencia dedicada a los docentes y a los hombres de la cultura, sobre el tema de la relación entre las cuestiones familiares y las reflexiones culturales actuales. La mañana del sábado estuvo totalmente dedicada a los jóvenes estudiantes; Mons. Paglia les celebró la S. Misa y dialogó con ellos sobre temas de familia y vida, a partir de numerosas experiencias de voluntariado y profesionales que viven durante su carrera universitaria. Una sana ventolera de buenas noticias en una ciudad que se despierta todas las mañanas bajo una pesada capa de contaminación sofocante.