Ha concluido el 17 de agosto la Semana Nacional de la Familia promovida por la Conferencia Episcopal de Brasil, con el tema "Transmisión y educación de la fe cristiana en la familia".

Con este motivo, el Papa Francisco ha enviado un mensaje.Para la defensa de la vida y de la dignidad de la persona humana, en cada etapa de su desarrollo, desde la concepción a la muerte natural, insiste el Papa, tal como expresó en la Encíclica "Lumen Fidei", los padres son «los primeros colaboradores de Dios en la orientación fundamental de la existencia y en la garantía de un buen futuro», y por lo tanto, para enfrentarse con «una cultura del descarte, que relativiza los valores de la vida humana».
 

«Los padres están llamados a transmitir con las palabras y sobre todo con sus obras, las verdades fundamentales sobre la vida y el amor humano, que reciben una nueva luz de la Revelación de Dios», se lee en el mensaje. En particular, ellos «están llamados a transmitir a sus hijos la conciencia de que ella debe ser siempre defendida, desde el vientre materno, reconociéndola como un don de Dios y garantía del futuro de la humanidad, pero también cuidando a los ancianos, que son la memoria viva de un pueblo y transmiten la sabiduría de la vid». Las familias podrán ser, así, «los testigos más convicentes de la belleza del amor sostenido y alimentado por la fe».
 

«La familia es uno de los tesoros más importantes de Latinoamérica y es patrimonio de la humanidad entera», escriben los obispos brasileños en una Nota que acompaña a la Semana.