Torna in Home Page
 HOME ESP » Personas » Abuelos y ancianos » La riqueza esta en quien educa al amor    

La riqueza esta en quien educa al amor   versione testuale
Miles de participantes a la Peregrinación de las familias al Santuario de Konk. En comunión, la oración del Papa Benedicto XVI por os abuelos



Miles de participantes a la Peregrinación de las familias al Santuario de Konk. En comunión, la oración del Papa Benedicto XVI por os abuelos
 
Más de 20 mil personas han participado en la peregrinación de las familias al Santuario de Nuestra Señora de Knok, en Irlanda, el domingo 8 de septiembre. Sobre el altar, miles de peticiones de los niños de la escuela primaria, recogidos durante el ciclo escolar, para agradecer al Señor el don de los abuelos. Durante la Peregrinación se reflexionó sobre el rol de los ancianos y de los abuelos en la familia y en la sociedad actual. "La familia no es sobre todo la comunidad natural primaria que vive bajo el mismo techo, sino que comprende a todas las personas que están ligadas en parentesco, natural o adquirido, constituyendo juntos la sociedad nuclear", afirma Mons. Carlos Simón Vázquez, secretario del Pontificio Consejo para la Familia, que ha participado en la Peregrinación en representación del Dicasterio. "Los ancianos desarrollan una fundamental e irrenunciable función de testimonio y de educación al amor , a las relaciones, y a la responsabilidad con el otro. Y, en la crisis económica actual, muchas de las veces, de sostenimiento económico de sus familias". En muchas de las 26 diócesis de Irlanda existe una oficina para la Pastoral de los ancianos. Los peregrinos hacen juntos la oración por los abuelos de Benedicto XVI. Un oración - es el comentario de Mons. Carlos Simón Vázquez - " con un fuerte valor ecuménico" Muchos después de la Peregrinación han confirmado su participación a la Peregrinación de las familias organizado por el Pontificio Consejo para las Familias a la Tumba de San Pedro, en Roma el próximo 26 y 27 de octubre.
 
Oración por los abuelos
 
Señor Jesús, Tu que naciste de la Virgen María, hija de San Joaquín y Santa Ana.
Mira con amor a nuestros abuelos de todo el mundo.
Protégelos: son fuente de riqueza para las familias, para la Iglesia y para toda la sociedad.
Sostenlos: también en la vejez continúan siendo para sus familias pilares fuertes de fe evangélica, custodios de los nobles ideales de la familia, tesoros vivientes de sólidas tradiciones religiosas.
Haz que sean maestros de sabiduría y de valores, que transmitan a las generaciones futuras los frutos de su experiencia humana y espiritual.
Señor Jesús, ayuda a las familias y a la sociedad a valorizar la presencia y el papel de los abuelos. Que nunca sean ignorados o excluidos, sino que encuentren siempre respeto y amor.
Ayúdales a vivir serenamente y a sentirse acogidos por todos los años que tu les has concedido.
María Madre de todos los vivientes, protege siempre a los abuelos, acompáñales en su peregrinaje terreno, y con tu oración intercesión haz que todas las familias se reúnan un día en la patria celestial, donde tu atiendes a toda la humanidad por el gran abrazo de la vida sin fin. Amén.
 
Benedicto XVI
 
 
 
print
Copyrights 2012. All rights reserved Pontificium Consilium pro Familia