Entre las fiestas religiosas populares de preparación a la Navidad, en algunos países latinoamericanos, está la tradición de la novena de las “
posadas”: nuevo encuentros festivos y de oración para revivir el viaje hacia Belén de José y María y el nacimiento de Jesús.
Las “
posadas” se componen de cuatro momentos: al rezo del rosario; la procesión con el canto de los santos peregrinos, que llaman a las puertas para pedir refugio pero son rechazados, hasta que llegan a una casa que ofrece hospitalidad; la rotura de la piñata con los ojos vendados (que significa la ruptura con el pecado y la confianza en la voluntad de Dios); la “
pastorela”, es decir la representación teatral del nacimiento del Niño Jesús, con la llegada de los pastores para adorarlo, después de haber sido tentados durante el trayecto por diablillos (que representan las tentaciones de las que hay que defenderse con la fuerza de la fe para ver finalmente a Jesús)
En el proceso de secularización de muchas celebraciones populares, incluidas las “posadas”, algunas partes se han perdido o han sido desprovistas de su estructura narrativa original.
En adjunto, la “pastorela” a la luz del Evangelio escrita por María Elena Hernández.