"”Cómo evangelizar y cómo proclamar el Evangelio de la familia en un momento en el que reina un concepto antropológico que se ajusta a la cultura dominante y que transforma la concepción y el sentimiento del amor, de la sexualidad y de la corporeidad?". Esta es la pregunta central que los obispos españoles, miembros de la subcomisión episcopal para la familia y la defensa de la vida, se hacen en el mensaje dedicado a "La alegría del Evangelio de la familia", escrito para preparar el Día de la Sagrada Familia, que se celebrará el 28 de diciembre.
La respuesta, explican los prelados, se encuentra en el Evangelio, que "anuncia que es posible conocer el verdadero amor, el amor que se presenta como una vocación, como un camino que conduce hacia la plenitud que llena el corazón humano y lo hace ser libre y feliz". La "vocación al amor", por lo tanto, hace en ello hincapié la Iglesia Ibérica, está "en el corazón del Evangelio de la familia" y tiene su "origen en el amor de Dios."
La misión de los padres, según los obispos españoles, "es insustituible", y su "responsabilidad es enorme" para que estos puedan comunicar a sus hijos "la verdad del bien de la familia." Al mismo tiempo, se insta a las instituciones públicas para que "cuiden, ayuden y protejan la estabilidad y la seguridad de las familias. "Además resulta esencial, se lee en el texto, recordar la centralidad del núcleo familiar "en la transmisión de la fe", para que esta sea "viva, alegre, impulsada por la esperanza y por la caridad." Con motivo de la Fiesta de la Sagrada Familia, los obispos hacen una invitación a los fieles para "experimentar y dar testimonio de la alegría del Evangelio de la familia en casa, en la Iglesia, en la sociedad, especialmente allí dónde la pobreza material, social o espiritual exige un anuncio convincente de esperanza y de salvación."