Ha causado una gran alegría a todos los creyentes el reciente anuncio del Papa Francisco acerca de los padres de Santa Teresita del Niño Jesús, los esposos Luis y Celia Martin: el 18 de octubre serán canonizados convirtiéndose así en la primera pareja de santos modernos, elevados a los honores de los altares precisamente cuando el Sínodo sobre la familia estará en su pleno apogeo.
El factor decisivo, que da prueba de la santidad de los esposos, ha sido el milagro que tuvo lugar en 2008 por su intercesión. La beneficiaria de la gracia es una recién nacida española, Carmen Lourdes Pérez-Pons, milagrosamente sanada justo después de la beatificación de los Martin, beatificación celebrada el 19 de octubre de ese año.
Unos días antes de esta fecha, el 15 de octubre, en Valencia, nacía prematuramente la pequeña Carmen Lourdes: pesaba solamente un kilo y medio y presentaba una grave insuficiencia respiratoria. En los días siguientes su estado se empeoró. Sufrió una hemorragia cerebral, necrosis en varias partes del cerebro y una septicemia. Su muerte se esperaba de un momento a otro.
El 24 de noviembre se empezó a rezar una novena a los beatos Martin e inmediatamente, al día siguiente, la ecografía cerebral registró una notable mejoría y la respiración de la pequeña volvió a la normalidad, lo que la condujo rápidamente a una completa curación. Curación que, desde entonces hasta ahora, se ha mantenido estable permitiendo un desarrollo físico y mental normal. Los expertos consultados sobre la cuestión están unánimemente de acuerdo en que la sanación es científicamente inexplicable. Además la enfermedad no dejó secuelas patológicas en la pequeña.
