Mons. Piotr Mazurkiewicz, de nuestro Dicasterio, en la Convención en el Vaticano del "Dignitatis Humanae Institute".
El "Dignitatis Humanae Institute" organiza la segunda Conferencia Internacional sobre el tema: "Aplastado entre las legislaciones europeas y las constituciones nacionales: ”hay sitio para el Cristianismo?", el viernes 28 de junio, en la sede de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales, la Casina Pío IV, en el Vaticano. El Instituto nació en el seno del Parlamento europeo para promover la tutela de los valores irrenunciables de la dignidad humana y de la vida, desde la concepción hasta la muerte, a través de la participación de la fe cristiana en la vida pública y en políticas de civilización, para el reconocimiento del hombre como creado a imagen y semejanza de Dios. El Presidente honorario es el card. Renato Raffaele Martino, Presidente Emérito del pontificio Consejo justicia y Paz. Invitado de honor en la jornada inaugural: el card. Raymond Leo Burke, Prefecto de la Signatura Apostólica.
Entre las conferencias programadas, dos están dedicadas al Ordenamiento jurídico europeo sobre políticas familiares nacionales, protección de la vida y de la dignidad humana. En el primero, moderado por el doct. Pavel Parfentiev, director del Movimiento para las políticas de tutela de la familia, intervendrá entre otros mons. Piotr Mazurkiewicz, del Pontificio Consejo para la Familia.
Mons. Mazurkiewicz afirma, entre otras cosas, en su intervención que hay un "conflicto" entre las instituciones europeas y las políticas nacionales sobre la familia. En particular, «algunos Estados y ciertos grupos ideológicos y lobbys, usan las instituciones internacionales para imponer sus ideas, supuestamente "avanzadas», con frecuencia en nombre de la democracia. Pero como se lee en la Encíclica de Juan Pablo II "Centesimus Annus" (46): «La historia demuestra que una democracia sin valores se convierte fácilmente en un totalitarismo abierto o camuflado». El papel jugado por las Cortes internacionales está transformando la democracia en "juristocracia", afirma Mons. Mazurkiewicz. La importancia creciente de las Organizaciones no gubernamentales para la defensa política de temas relevantes , pertenece a esos fenómenos de teoría política que el filósofo alemán Jürgen Habermas define de «refeudalización de la sociedad civil», en cuanto que no representan a la mayoría de la sociedad civil. Así, mientras el Derecho Internacional ha nacido sobre las bases de derecho natural, se asiste hoy a lo que Benedicto XVI ha llamado «la dramática deriva del derecho natural a una concepción de puro funcionalismo positivista». La ideología de género, es una ideología de poder, por la cual el matrimonio y la familia son considerados «estructuras de opresión». «Hace falta una auténtica respuesta cultural, una nueva síntesis humanística, basada en la antropología cristiana del amor, de la comunión y de la complementariedad». Por lo tanto, se necesita la participación activa de los cristianos en política y la elaboración de estrategias, promoviendo con claridad las posturas cristianas en los medios y en las instituciones, descomponiendo el problema en sus múltiples facetas (en lo que respecta al matrimonio, por ejemplo, en la cuestión de los derechos de los menores, para su concepción o para las adopciones; la objeción de conciencia en los servicios sanitarios, en el sistema educativo y en las administraciones públicas; la discriminación de las parejas heterosexuales al suprimirse términos como "marido" y "mujer" o "padre" y "madre"; la limitación de la libertad religiosa por la aprobación de leyes equivocadas en nombre de la laicidad). Invitando a la vigilancia sobre opciones que condicionan la vida de los pueblos y de la humanidad, recordó lo que profetizó el escritor Thomas Stearns Eliot: «El fin del mundo no vendrá como una explosión, sino como un salto», Mons. Mazurkiewicz concluyó: «Los bárbaros están dentro de las murallas».